Niños de alicante aprenden a apreciar sabores y a hacer postres en el centro de Desarrollo Turístico.
Los expertos aseguran que para poder apreciar una exquisita comida, es importante poseer un mínimo desarrollo del paladar. Así lo estima este centro de alicante, organismo encargado de desarrollar jornadas dirigidas a los jóvenes que quieran ejercer algunas de las actividades propias del sector turístico. Y es que para deleitarse con un buen plato es imprescindible paladear con detenimiento el sabor de las distintas combinaciones de los alimentos.
Por ello desde hace unos años, el centro, ha establecido en su calendario el día del gusto. Niños de entre siete y ocho años visitan todos los miercoles las instalaciones para asistir a clases de cocina al tiempo que aprenden a conocer que son las pápilas gustativas, donde se encuentran y cual es su función.
Con el pastelero aprenden a hacer magdalenas. Al término de la mañana reciben un diploma y el postre que mediante juegos han elaborado.
martes, 2 de noviembre de 2010
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